Una oportunidad histórica estuvo en las manos del Gobierno de Iván Duque, pero que echó a la basura por lo que no pretendemos dejar atrás: El odio.

El Acuerdo de Paz en Colombia fue un logro de bastante significación para los colombianos. Los ciudadanos sentían un ambiente totalmente diferente al que el país vivía años anteriores. Un ambiente de paz, de tranquilidad. Un ambiente de resurrección, transformación y esperanza.

Este proceso fuera traído muchísimos beneficios para los colombianos y gran parte de estos en términos económicos. 

Imagen: Dinero.

Las FARC-EP una guerrilla con surgimiento de más de medio siglo estaba sentada. Dejando las armas. Hablando de democracia, expectativas y proponiendo ideas para seguir el camino anhelado de transformar socialmente nuestro país.

Los países más ricos del mundo apoyaban a Colombia. Brindaban apoyo desde cualquier índole: Económico, Humano, Idealistas, etcétera.

Sectores como los grandes empresarios y las iglesias lo respaldaban. 

Eran demasiada las expectativas y la emoción.

Sin embargo, no era un acuerdo perfecto, tenía también sus partes negativas, como las disidencias de las FARC-EP que seguían delinquiendo o el aumento de la producción de cocaína.

En el año 2018 Colombia decide cual desea ser su presidente, y gana Iván Duque del partido Centro Democrático quiénes eran totalmente opositores a ese acuerdo.

Unas elecciones demasiado polarizadas y que por consecuencia cualquiera de los dos candidatos que llegarán a quedar en segunda vuelta iba a tener un país fracturado al tomar posesión, como lo está viviendo actualmente el elegido, el Pdte. Iván Duque.

Para seguir en su camino, el actual Gobierno, como se esperaba, entorpeció los acuerdos de paz que venía adelantando su antecesor y comenzó el país a tener trágicamente una crisis económica interna por aspectos externos e internos.

En los externos por la guerra comercial entre los países de Estados Unidos y China. Y por aspectos internos que generan la desconfianza en el consumidor y empresariado que trae nuevamente las FARC-EP se fortalezcan como guerrilla y/o surja una nueva guerrilla, BACRIMS tomen posesión y el ELN invada más territorios.

Todo esto fuera sido menos operante y disminuido si el Gobierno del Pdte. Iván Duque fuera fortalecido el Acuerdo de Paz y fuera seguido el camino de hacer la Paz con esta guerrilla por el significado que ocupa desarrollar y ser tajante en el apoyo de negociar con el ejército insurgente más antiguo del país, y con la seguidilla de la ayuda internacional que tenía Colombia en concordancia de este proceso.

Hablando en términos macroeconómicos, el país fuera tenido la oportunidad de por fin poder aprovechar de mejor y mayor manera las tierras fértiles. Por ejemplo: En el año 2017 el PIB de Colombia tuvo una baja significativa y que no pasó a mayores porque el sector agropecuario creció y esto en consecuencia del proceso de paz ya acordado y en transformación.



(DANE, 2017)

En el año 2017 el sector agropecuario tuvo un 4,9% de crecimiento, un porcentaje bastante importante de acuerdo con los años anteriores, y que fue el más importante para ese año.

El sector agropecuario significa avance y Colombia por poseer tantas tierras fértiles es de transcendencia ser potente ante el mercado interno y externo para así lograr mejorar las estadísticas económicas, mejorando y equilibrando los precios de mercado.

En una investigación por la Revista Semana, de la sesión Sostenibilidad Semana, en Colombia para el año 2018 tenía 111,5  millones de hectáreas censadas y 43 millones en uso para agro. De las 43 millones de hectáreas con uso agropecuario, 34,4 estaban dedicadas a la ganadería y solo 8,6 millones a la agricultura. Debería ser en modo contrario, pues se recomienda que 15 millones de hectáreas deberían utilizarse para ganadería pero se usan más del doble. Por su parte, 22 millones son aptas para cultivar pero el país está lejos de llegar a esa cifra.

Los predios de más de 1000 hectáreas dedican 87 % del terreno a ganadería y solo el 13 % agricultura. En los predios más pequeños, es decir, los menores a 5 hectáreas, el 55 % del predio se dedica a ganadería y el 45 % a agricultura. A pesar de que la situación es menos dramática en este último sector, la tendencia a la ganadería siempre es más alta que otras formas de explotación de la tierra.

De acuerdo con estos datos, se puede que Colombia tiene una grata desigualdad en el manejo de las tierras, un problema que siempre ha perdurado. La concentración de tierras es el problema más grave, y que a pesar de los pocos que las poseen, no le dan el uso adecuado que deberían tener estas para la producción colombiana.

Ahora, el acuerdo de paz tenía muchos programas de economía solidaria dentro del sector agro, y que venía aliado a una reforma para la restitución de tierras a las personas que por la guerra las dejaron y/o se las robaron y con la esperanza de proponer políticas públicas contra la concentración de tierras y que no haya producción agropecuaria alguna. 

Asimismo, otro de los sectores que vendrían en forma de auge sería el de turismo, dónde por la confianza que trae un proceso de paz y escudado por el gobierno, atraería muchísimo más a la gente extranjera para visitar al país. Por ejemplo, en el año 2017, el turismo, según el ministerio competente de ello, creció en un 28% respecto a la cifra de 7% en el mundo. Colombia recibió más de 6´500,000 de turistas, un aumento del 150% respecto al 2010. Todo esto gracias al proceso de paz. (Dinero, 2018)

Por otra parte, los inversionistas. Los empresarios respecto a la relación del proceso de reincorporación en su mayoría lo respaldaban y una parte eran moderados. Uno de los diálogos que sostenían era confianza del consumidor y la libertad que iba haber más donde incorporarse, dónde antes no se había podido llegar por culpa de la guerra. (Heraldo, 2016)

Y es que si de importancia hablamos, los Gobiernos entrantes deberían tener los intereses prioritarios sobre la sociedad no por intereses personales. Este proceso iba a tener en términos económicos muchísimo de ganar para el país por el respaldo que tenía internacionalmente, de igual manera por el efecto racional que cautivaba y atraía a los diferentes sectores sociales. 

Fue una oportunidad que perdió este Gobierno y que pudo ser de total éxito a medida que pasaran los años y seguir disminuyendo la desigualdad social que vive Colombia.


Referencias

DANE. (2017). Obtenido de https://www.dane.gov.co/files/investigaciones/boletines/pib/bol_PIB_IVtrim18.pdf
Dinero, R. (2018). Obtenido de https://www.dinero.com/pais/articulo/record-de-turistas-en-colombia-2017/255180
Heraldo, E. (2016). Obtenido de https://www.elheraldo.co/economia/empresarios-entre-optimistas-y-moderados-frente-al-acuerdo-281276






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